martes, 21 de octubre de 2008

La pregunta 23/OCT/08

Este fin de semana pasado, ha sido bastante normal. En los dos partidos que pité, no ocurrió nada a destacar.
Un cadete masculino, por la mañana. Partido que el equipo visitante defendió bastante bien, a pesar de que físicamente, muchas veces no llegaban. Utilizaban muchas manos, pero tenían un equipo delante bastante limitado técnicamente. Otra vez, con el mismo problema de todas las semanas, la técnica individual.
Espero que los coordinadores de los clubs se den cuenta de lo importante, que son los entrenadores de los equipos inferiores. Si, a los equipos de formación, ponemos a cualquier chaval joven que tenga mucha ilusión, pero solo eso. Estamos creando jugadores que no llegaran a ningún sitio. Por eso es muy importante el trabajo de los coordinadores o directores técnicos de los clubs. Ayudar y enseñar a los jóvenes entrenadores en la metodologia y en los objetivos a alcanzar.
En este aspecto, tengo una experiencia muy cercana, los entrenadores de mis hijos. Son dos personas que llenan un espacio, sin ninguna pretension, con mucha ilusión, pero nada más. Realizan ejercicios sin enseñar nada, no explican cómo se hacen, no aportan nada y los perjudicados son los niños. Que observan , cuando se enfrentan, a los demás equipos, que lo hacen mejor que ellos. Pero lo mas triste, es tener que oir a muchos compañeros de mis hijos, decir que si siguen entrenando las mismas personas, el año que viene, se cambiaran a otro deporte. Y lo peor de la situación, es que el coordinador, teniendo soluciones, valora más otros aspectos . Colocando en un segundo o tercer plano, a los niños. (Minis de primer año).
De esta manera, no podemos crear la base de un club.
Volviendo al fin de semana, por la tarde, junior masculino. Aplastante victoria local de 30 puntos, sin comentarios.
Y para finalizar, la pregunta. En el club que juegan mis hijos, un entrenador me ha pedido ayuda para realizar un trabajo específico de tiro, con su equipo de cadetes. Sin dudarlo, mi respuesta ha sido que sí. Pero , estará todo el mundo de acuerdo?
Lo sabremos la semana que viene.




jueves, 16 de octubre de 2008

Dos barritas 16/OCT/08

Llego al pabellón, medio dormido, con unos cuantos quilómetros encima. Pido la llave y me dirijo al vestuario. Oigo gritos de niños, se abre una puerta, y salen corriendo para ir a la pista. Me despiertan de golpe. Entro en el vestuario que me han adjudicado. Un banco, poca luz y al fondo una ducha, sin puerta para que se moje todo. Por cierto, siempre me he preguntado porque los vestuarios de los árbitros son tétricos, pequeños y vetustos.
Empieza el primer partido, categoría mini. Me sorprende un jugador, baja la pelota, domina las dos manos y dirige a sus compañeros, todos le buscan. Espero que no se estanque, su entrenador me dijo que trabajaban muy bien la técnica individual, se notaba.
Siguiente partido, un infantil nivel "A". Fue emocionante, podía ganar cualquiera, y el que tuvo más fe y no se sintió presionado por la camiseta que llevaba. Ganó.
El partido acaba, casi a las dos de la tarde. Salgo corriendo porque tengo el siguiente a las cuatro. Me ducho en cinco minutos y me subo al coche para hacer 40 km. Mucho tránsito, sábado, es la hora de comer. Intento ir deprisa, pero soy prudente. No hago ninguna locura con el coche. Llego a mi siguiente destino a las tres y diez. Entiendo que si tengo que buscar un bar y luego aparcamiento cerca del pabellón, no llego. Decido dirigirme directamente al pabellón, no tengo tiempo de comer. Veo en la entrada, las famosas maquinas de patatas, chuches y chocolatinas. No me queda más remedio para no desfallecer, que comprar dos barritas de chocolate. Vaya comida!.
Junior femenino. Otro nivel. De los dos equipos, solo hay tres o cuatro jugadoras, que podrían llegar a jugar a tercera catalana. Que falta de fundamentos. Los dos equipos defienden en zona, no son valientes. Los entrenadores están más pendientes de protestar faltas que del juego de su equipo. Esta es una de las razones, por la cual seguimos hundidos en la mediocridad de nuestra provincia, pero es lo que hay.
Se acaba el partido, me ducho y me voy para mi casa. Con dos barritas de chocolate en el estomago y un hambre que me muero.
La semana que viene espero poder comer.

lunes, 6 de octubre de 2008

Primera jornada 8/OCT/08

Vaya nivel que tenemos en nuestra provincia!. Puede ser, que la frase, suene muy dura, pero creo que es una realidad brutal.
El primer partido, que me tocó pitar, fue un mini femenino de nivel "A". De 24 jugadoras que jugaron, solo había dos, a lo máximo tres, que no hacían pasos de salida, que botaban correctamente y que pasaban con cierta facilidad. El resto un desastre, las entrenadoras no corregían nada, solo les importaba el resultado. Eso sí, no paraban de animar. Por cierto, alguna corrección respecto a la técnica individual ?..... Ah sí, no paraban de animar.
Siguiente partido, pre-infantil masculino nivel "B", juego más duro, algún jugador con dominio de las dos manos, un jugador interior que sabia utilizar el cuerpo y poca cosa más. Uno de los entrenadores, conocedor de la falta de técnica individual de los jugadores, presionaba la salida de fondo. Eso sí, fue emocionante, porque hubo prórroga.
Ultimo partido de la jornada, cadete femenino nivel "A". Llegué con el tiempo justo, porque me equivoqué de pabellón. Nada más entrar vi la rueda de calentamiento de los dos equipos, hacían tiro. Sin comentarios.
Empieza el partido, lanzo la pelota al aire. Y que me encuentro, que el equipo que defiende la primera posesión se coloca en 2-3. Tiran, fallan, corren unas al contraataque, otras a defender y que tipo de defensa utilizan? 2-3. Lo siento, mi manera de ver el baloncesto es diferente, tendría que estar prohibido es estas categorías defender en zona. Individual, jugar 1x1 o 2x2, y espabilarse. Mas técnica individual y menos esperar a que el contrario falle.
Nunca progresaremos , hemos de ser valientes y alegres en la pista.

viernes, 3 de octubre de 2008

Las razones. 3/OCT/08

A partir de mañana, empiezo una nueva andadura, por estos campos de baloncesto que Dios nos ha dado. Recuerdo, allá por el año 72, cuando me llevaron a ver mi primer partido de básquet. Diez jugadores luchaban por una pelota , y a su lado corrían unos señores de gris que llevaban un silbato, y que pitaban cuando hacían algo mal. Pensé, nunca en la vida seria árbitro, sino que siempre seria el que tuviera el balón entre las manos, y en un futuro mas adelante enseñar a niños lo que yo había aprendido. Pero, la vida da muchas vueltas, y me remito a la famosa frase de "nunca digas que de esa agua no beberé". Porque después de 33 años jugando y 25 entrenando, he decidido ver el baloncesto desde otra mirada, me he hecho árbitro.

Los dos últimos años, los he pasado entrenando en un equipo senior femenino. El trabajo que se hizo fue bueno. El primer año, con seis incorporaciones nuevas, llegamos a conseguir la fase de promoción para ascender a primera catalana. Pero ,debido a que no se programó bien, y con muchas jugadoras en exámenes finales, no llegamos a conquistar el ascenso, aunque la experiencia fue positiva y enriquecedora para todos. Pero ya empecé a tener alguna discusión referente a mi visión del Basquet, soy una persona muy competitiva.

Este pasado año, fue mejor. Fichamos a tres jugadoras, que provenian de Copa. Este hecho, hizo que el equipo hiciera un salto de calidad. Pero, a su vez, provocó, que jugadoras con un nivel un poco mas bajo, no aceptaran su "rol" dentro del equipo y crearan un cierto mal ambiente. Es decir, en lugar de trabajar mas duro, y alegrarse de que en toda la fase regular ibamos primeras del grupo, hicieron todo el contrario, demostrar continuamente que su egoismo estaba por encima del equipo.

Estas situaciones , que a ningún entrenador le agrada, (a pesar de quedar campeonas de la liga regular, ir a la final a cuatro y conseguir el ascenso a primera catalana) te hacen perder la ilusión y las ganas de entrenar. Es decir, me hizo plantear un cambio radical, necesitaba desintoxicarme , dejar de entrenar y dedicarme a realizar una nueva faceta que nunca había hecho. Arbitrar.